jueves, 11 de octubre de 2007

El Gobierno de Frondizi. Política Exterior. Documento Académico.


Autor: Alejandro Montbrun

A partir de derrocamiento del Gral. Perón, el gobierno de la Revolución Libertadora, proscribió de cualquier participación electoral al Partido Justicialista.
En el gobierno del Gral. Aramburu, se llamó a elecciones para descomprimir el descontento social que existía por la implementación de un modelo económico de ajuste.

Al estar proscripto el peronismo, la masa de votos que quedaba sin destino era mayoritario, y quien se va a encargar de recaudar esos votos será Arturo Frondizi de la UCRI, mediante un pacto secreto con Perón en el cual se cambiaban votos y tregua política en los primeros meses de gobierno, por amnistía para los presos peronistas, legalidad para las organizaciones políticas y sindicales del Movimiento y futuras elecciones sin proscripciones.

Así, el 23 de Febrero de 1958, la UCRI de Frondizi (con los votos peronistas) vence a la UCRP (liderada por Balbín) asumiendo en el poder el 1º de Mayo, y junto al Ministro de Relaciones Económicas y Sociales de la Presidencia Rogelio Frigerio, diseña una estrategia económica que se apoya fundamentalmente en la integración del sector manufacturero, sustituyendo bienes intermedios, en especial combustible, acero, papel y productos químicos, abriendo su explotación a capitales extranjeros.

En el plano internacional a Frondizi le tocó gobernar con un ciclo de tensión en la Guerra Fría, con el ingreso de ésta en el Continente mediante el progreso de la Revolución Cubana.

La diplomacia frondizista entendía que debía sostener un perfil alto en el mundo, propiciando la paz que seguiría al desarrollo.Tuvo disposición a mantener relaciones con todos los países, incluso con el riesgo de vincularse con el mundo socialista, sin desconocer el condicionamiento de la esfera de Estados Unidos a la que pertenecía. Pasos en esta dirección, fueron los viajes de Frondizi por América Latina, los EEUU, Europa y Asia.

Desde el comienzo del gobierno se había decidido a reemplazar el alineamiento con EEUU que se venía insinuando desde 1955, por una relación más madura y equilibrada, no disimulando con Washington las diferencias políticas y militares.
Un hecho trascendente es la asunción de Kennedy a la Presidencia de los EEUU (1961), quien lanza la “Alianza Para El Progreso Para América Latina”,el cual consistía en un planteo de institucionalización democrática y cambio social que quería contrarrestar una posible expansión en el continente de la Revolución Cubana. El perfil modernizador de las autoridades argentinas coincidían con el plan del gobierno de EEUU.

El Presidente Kennedy estaba empeñado en solucionar este problema cubano y aquí el Presidente Frondizi tuvo un rol activo de mediación, que puede representarse en la reunión que mantuvo con el Che Guevara en Bs.As.(Agosto de 1961), en donde aquel solicitó a éste que no intente exportar la Revolución al resto del Continente. Enterados de esta reunión, la cúpula militar argentina no entendió el propósito y solicitó a Frondizi la renuncia, quien se negó a dimitir pero debió ceder posteriormente y romper relaciones con Cuba.

Los hechos siguieron en esta dirección, en Enero de 1962 en la “VII Reunión de Consulta de Ministros de Relaciones Exteriores de la OEA”, en el que se discutirían sanciones contra el Régimen de Fidel Castro. Allí, la delegación argentina repudió los métodos marxistas y suscribió denuncias contra la injerencia de potencias extracontinentales, pero fue intransigente en materia de defensa de los principios de no-intervención, autodeterminación e igualdad jurídica de los Estados. Además a la hora de votar decidió abstenerse de acompañar la resolución de establecía la expulsión de las autoridades cubanas. Este último gesto, fue tomado nuevamente por las instituciones militares argentinas, como prueba definitiva de lo que entendían como orientación marxista de Frondizi; y junto al desgaste por las huelgas producidas y el triunfo en la Provincia de Buenos Aires de la Unidad Popular ( un remedo del peronismo), dieron el golpe de gracia al gobierno de Frondizi. Así, en la madrugada del 29 de Marzo de 1962 fue destituido y José María Guido (Presidente del Senado) es nombrado en su lugar.

De acuerdo con José Paradiso, el gobierno de Frondizi, optó por una ubicación en el mundo que combinaba una economía semicerrada con una diplomacia activa orientada autónomamente, con un alto protagonismo del propio Presidente a través de gestiones y viajes, que no le alcanzaron para lograr estabilidad interna y disuadir a los golpistas. Esto mismo señala el Dr. Miranda, al sostener que la política de inserción en el Mundo del gobierno de Frondizi, se considera anémica o débil, porque aunque hubo voluntad autonomista, las variables domésticas no colaboraron.

Por último, si analizamos los paradigmas de las relaciones internacionales, el gobierno de Frondizi se sitúa en el estructuralismo en su versión desarrollista, que hace hincapié en el deterioro de los términos de intercambio y para superar esas dificultades propone alcanzar por etapas la industrialización a la que llegaron los países del Centro.