jueves, 14 de marzo de 2019

El AGUA VALE MÁS QUE EL GOLF, Y LA PLAZA NO TIENE PRECIO



Por Alejandro Montbrun

El candidato a Intendente Oscar Santarelli, usurpa hace 20 años un lote público destinado a utilizarse como plaza. El espacio en cuestión es una generosa medialuna que completa el círculo formado por la plaza Islas Malvinas ubicada en ruta 5.

A mediados de los 90´ Santarelli compró calles colindantes a la plaza para instalar allí un campo de Golf y Cabañas. Utilizando la figura de “desafectación del dominio público” pudo hacerse legalmente de las calles, pero una plaza no puede comprarse y no puede venderse porque no tiene precio (su valor simbólico lo impide, no está sujeto a lucro) entonces siguió como patrimonio público-estatal en los hechos, aunque en la práctica la placita fue usurpada y anexada al emprendimiento comercial. Todo un aporte de la sociedad belgranense para engrosar una billetera privada.

En 2007 cuando Santarelli fue candidato a Intendente y por su exposición pública la usurpación de la plaza fue un tema de agenda, ensayó una defensa infantil en un entrevista radial: “a ese lugar lo estoy cuidando”.

Este antecedente permanece en la memoria de muchos, olvidado por algunos y desconocido por una importante porción de la sociedad que ha llegado a VGB durante la última década.
En cualquier localidad un candidato que usurpa tierras públicas (más aún una plaza para favorecer su negocio privado) estaría inhibido legal y socialmente de participar por la intendencia. Sin embargo, aquí avanza su candidatura.

En este contexto preelectoral y en plena ronda mediática, Santarelli hace una propuesta sobre su emprendimiento comercial donde no pone en consideración la devolución de la plaza, sino que, molesto por no entender la preocupación de algunos/as sobre la explotación del recurso hídrico serrano (Pozo Verde)  que él utiliza para regar la cancha de golf, desafía: “Si ustedes no quieren que yo use el agua esa para regar, no se hagan problema, yo cierro la cancha, hago un loteo y me pongo 2 o 3 millones de dólares en el bolsillo y se terminó la historia”. (click para ver video)

Sin querer Santarelli deja abierta una serie de buenos debates:

- En caso de vender y meterse dos o tres millones de dólares en el bolsillo ¿devolverá la plaza o querrá venderla como propia?
- ¿Cuál ha sido el impacto ambiental de utilizar una vertiente serrana (Pozo Verde) para regar un emprendimiento comercial como el golf? siendo que el deterioro de esa cuenca es notable, pasando en pocas décadas de una olla que invitaba al chapuzón, a un pequeño charco 20 o 30 cm.
- ¿Qué opinan sus adversarios políticos sobre la usurpación de la plaza, y qué opinan sobre la utilización de un recurso natural para sostener el verde de un golf?

Para el autor de la nota no hay interrogantes: El agua vale más que el Golf y la Plaza no tiene precio.





#DevolvéLaPlaza